HAY QUE SER JUSTOS CON ELLOS.

 Entramos en la recta final del campeonato en Primera Catalana y nuestros chicos nos mantienen vivos en la lucha, y eso que como bien dice uno de nuestros capitanes, en agosto ya nos daban por muertos. Han debido hacer frente a dos traslados de campo para jugar. Han tenido que entrenar en diversas instalaciones en Tiana, Barcelona y Sant Adrià del Besós. No reciben ni un solo €uro y alguna vez se han tenido que rascar el bolsillo. La plantilla tiene una media de 20 años y seis meses, con diez jugadores que no alcanzan esa edad, teniendo el más joven 19 años y el más “veterano” veintitrés, o sea lo que normalmente es el baremo de edad que tiene un equipo B. Nuestro entrenador ha demostrado que pese a su juventud realiza un gran trabajo junto con sus ayudantes y muy pocos equipos nos han pasado por encima. Estoy convencido, y no solo yo, puesto que lo hablamos a veces en la grada, de que este equipo, con más tiempo y más tranquilidad podría no solo mantenerse sino tener miras mucho más ambiciosas y además es un equipo en formación y para mucho tiempo. Por todo eso y por ser el equipo más comprometido de la historia que hemos conocido en la Grama, queremos romper una lanza y ser justos con ellos.