UN LOCO LLAMADO REMO.

 Cuando en el mes de octubre Sergi Vargas, en Golcat entrevistaba a nuestro entrenador y éste le decía “Quiero subir a la Grama”, podría parecer que Remo se había vuelto loco. Remo llegó al equipo en la jornada cuatro, con el equipo en la décima posición, a siete puntos del líder y a cuatro del descenso, y después en la jornada once, la Gramenet estuvo a catorce puntos del primer clasificado. A falta de una fecha, Remo ha conseguido poner al club empatado a puntos con el líder y que estemos luchando mano a mano con ellos por el campeonato. Remo empezó la temporada como jugador, pero no dudó dejarlo todo y venirse a la Grama para debutar como entrenador. Su ilusión y su trabajo ha dado sin duda alguna resultados. Y no solo los domingos, sino también los días de entrenamiento, con más de una veintena de jugadores entrenando y con todo el equipo técnico pendientes de ellos. Remo se ha tomado lo de preparador de la Gramenet como un trabajo y entre los aficionados del club, el consenso es que Remo se ha ganado el crédito. Ha impuesto su filosofía de fútbol junto a Pipa, y ha gestionado un vestuario con jugadores jóvenes y veteranos, con futbolistas con mucha experiencia nacional e internacional, con otros a los que el futuro les depara mucho aún. Es verdad que le faltan cosillas por pulir, pero eso se lo va a dar la experiencia y la materia prima que tiene, es suficiente para hacerse un nombre en el fútbol catalán a nivel de entrenador. No sabemos lo que ocurrirá este sábado. Si seremos campeones o no. Si ascenderemos en las eliminatorias a Segunda Catalana o no. Lo que sí sabemos es que Remo ha devuelto a los aficionados de la Gramenet la alegría y nos ha puesto a soñar con un presente y un futuro mejor. Gracias loco, gracias Remo.